Lourdes!¿Dónde encontraremos las palabras que alcancen a explicar todo cuanto ese nombre significa para la piedad católica en el mundo entero?¿Quién podrá traducir en palabras el ambiente de paz que envuelve la gruta sagrada en la cual, hace más 150 años, vino la Santísima Virgen para estar con la humilde Bernardette e inaugurar, de modo definitivo, un nuevo vínculo con la humanidad sedienta de consuelo y de paz? Por designio de la Divina Providencia, a ese lugar se asoció una acción intensa de gracia, especialmente capaz de transmitir a los millares de peregrinos, venidos de lejos, la certeza interior de que sus oraciones son benignamente oídas, sus dramas apaciguados, y sus esperanzas fortalecidas. En efecto, a lo largo de este siglo y medio, las ásperas rocas de Massabielle se han convertido en palco de las más espectaculares conversiones y curas, legando a la Santa Iglesia Católica un tesoro espiritual de valor incalculable.

Por eso que en varios lugares del mundo hay Santuarios,  Templos y Capillas consagrados a la Santísima Virgen con el titulo de Nuestra Señora de Lourdes.

Uno de ellos queda en Quilpué, donde los Heraldos del Evangelio, a pedido del Párroco  el Pe. Jaime Da Fonseca, animaron la procesión, que se realizó antes de la Santa Misa.

A seguir algunas fotos: